ASÍ FUE EL PRIMER CORRILLO DE LABIENHECHA
ESTO FUE LO QUE PASÓ

¡Hola! Soy María y hoy vengo a contaros cómo fue el primer Corrillo de Labienhecha (como asistente que fui y porque la experiencia me pareció increíble).

Para quienes no me conozcáis: desde hace algunos meses formo parte de Labienhecha y, aunque podría contaros lo guay que fue organizar este evento "desde dentro", voy a contaros cómo fue, "desde fuera", jeje.

Sé que muchas os quedasteis con muchísimas ganas de ver de qué va esto de El Club y entrar en El I Corrillo de Labienhecha, y que por una razón u otra no pudisteis.

Nos faltaron muchas personitas que ya son miembro del Club y que no pudieron asistir (para la próxima intentamos organizarlo con más tiempo). Y también hubo mucha gente que quería entrar pero, de momento, las plazas están cerradas.

Si quieres, puedes apuntarte a la lista de espera AQUÍ

Lo cierto es que ese primer corrillo no se puede volver a repetir, pero sí que, a través de mí, vais a poder sentir lo que cada una de las que estuvimos, pudimos vivir. 

Eran las siete menos dos minutos e Irene acababa de enviar la invitación a la reunión. En ese momento sentía ciertos nervios porque, aunque conocía y sabía todo aquello sobre lo que se iba a hablar, era inevitable ese gusanillo que tengo al ver a alguien a quien aprecio y admiro con los ojos brillantes y una sonrisa que habla por sí sola. Y sí, estoy hablando de Irene, que fue a la primera vi nada más iniciar sesión. 

Ella dice que estaba nerviosa, aunque creo que exagera, porque lo único quee se le notaba era la ilusión máxima de haber hecho realidad, poor fin, ese espacio para nosotras.

Pasaron los minutos y aún faltaba gente por entrar pero esto, queridxs Bienhechxs, acababa de empezar. 

La cosa empezó fuerte...jeje...

Irene, que ya a estas alturas todos sabemos la cuerda que tiene, está hablando de los materiales (yo estaba deseando que hablase de mmi favorito...) y por fin llegó ;)

No nos vamos a engañar, me dió un poco de vergüenza —a mí, y a todo el mundo, creo— pero fue maravilloso participar, opinar y votar algunas decisiones que se que son muy importantes y que mola mogollón que tomemos en equipo (o equipazo!)

Y WOW....LLEGÓ UN MOMENTAZO Y PENSÉ: ¿VA A HACER LO QUE CREO QUE VA A HACER?

Sí, lo estaba haciendo. En vivo y en directo estaba intentando rajar una de las muestras con la punta de un cuchillo (y a mala leche, jeje).

Después de eso, porque parece que le supo a poco, le prendió fuego a una de las muestras del nuevo bio-material.

IMPRESIONANTE

No puedo contar cuál fue el resultado de esas pruebas, porque lo que pasa en El Corrillo, se queda en El Corrillo, pero me quedé sin palabras. 

De hecho, moló mogollón el debate que surgió sobre una de las propuestas (gracias a las asistentas por opinar y colaborar en esto, porque fue increíble).

Lo mejor de todo vino cuando Irene nos presentó los bocetos de los nuevos modelos, y, siendo sincera, yo quería que se prototiparan todas las propuestas porque más no me pudieron gustar. 

Y...BOOM! 

Entre todas decidimos que todos las propuestas de los nuevos diseños eran alucinantes... y que no queríamos quedarnos con las ganas de verlos hechos en el taller. Así que Irene prometió que iban a prototiparlos todos y los enseñaría en el próximo corrillo (en primicia!)

La verdad es que he de decir que disfruté muchísimo. Es espectacular poder compartir este proceso con gente que siente la misma ilusión y ganas.

Espero con ansias e ilusión la siguiente y espero que tú formes parte de esto, porque otra cosa no se, pero vas a flipar.

Un abrazo grande!

María

P.D. Si quieres formar parte de El Club y poder asistir a próximos eventos como El Corrillo, apúntate AQUÍ y te enterarás antes que nadie cuando abramos plazas ;)